Estás muy cerca, casi pegado a mí, tus ojos me miran profundamente, tan profundamente como puedes desde esta realidad paralela en que nos encontramos. Gracias por estar tan presente, por acompañar mi día a día. Te quiero mucho…
Sé que estás ahí… sé que puedo contar contigo. Sé que no importa aquello que me pase, tus palabras y tu abrazo están allí apoyándome.
No importa que los demás no comprendan, tu abrazo está conmigo…