Huele su aroma y siente el ritmo que en tu cuerpo late, hasta que se transforma en una electricidad que sólo tus oídos perciben.

El ritmo está en tu cuerpo y con el aleteo de tus brazos puedes crear la más bella música…

Esa música que te da vida y se esparce en tu entorno…

No necesitas sonido…

Tú la escuchas… a través del movimiento del cuerpo,

ese cuerpo que se desplaza a tu propio ritmo.

Ese Ritmo que el universo te regaló.

¡Vibra…siente…!

imagen Pinterest

@poupeedinubila