Desandando caminos para visitar el terruño de la Familia Mujica, San José de los Arroyos.
Atravesar el río Paraguay a la hora en que se pone el sol, y sentir que te acompaña en la travesía es de una belleza muy particular.
Recorrer las rutas, con sus pueblos pintorescos, de calles empedradas y tierra colorada, con el muestrario de sus artesanías a la vera del camino, invita a soñar.
Recorrer la región de Cordillera, dónde el paisaje accidentado te inunda con su belleza…
Y llegar a San José de los Arroyos, al abrazo cariñoso de la tía Yoli y de los primos, sentarnos a conversar con el sonido de fondo de los pájaros y la inmensidad del campo…disfrutar del ocaso del sol y emprender el camino de regreso. Asunción nos espera. Nuevos encuentros. Más abrazos, anécdotas y risas y con las pilas bien cargadas al día siguiente retomamos el camino a casa…la balsa…el atardecer…el triste camino de Pilcomayo. Desandando caminos…