Nuestra sociedad se divide en los que gobiernan y aquellos que tienen otros ideales o simplemente viven su vida sin importarle los partidos políticos. En que momento se produjo este quiebre?, vaya a saber, nadie se querrá hacer cargo,siempre el culpable es el otro.
Nosotros, «los otros», no tenemos derecho a un buen trato en una oficina del estado, y si somos empleados de ella, pasamos a ser el enemigo al que hay que perseguir y aplastar.
Nosoros «los otros», no tenemos derecho a un empleo, por que no hay presupuesto, pero permanentemente se ven caras nuevas que se integran al ya colapsado estado porque tienen la suerte de estar entre los elegidos.
Nosotros «los otros», no podemos gestionar trámites personales en nuestro trabajo, porque tendremos la mala suerte de que se pierda la documentación, o se traspapele.
Nosotros «los otros», no somos personas, no tenemos derechos, ni siquiera aquellos que nuestros padres nos inculcaron: el saludo y un «gracias» cuando la opotunidad lo requiera.
Nosotros, «los otros» perdimos la libertad de la palabra sin que se nos juzgue como peligrosos y para mantenernos controlados se hacen correr comentarios de mal desempeño en la función pública, pero siempre por lo bajo, que todos se enteren pero no quede nada escrito.
Si, pertenezco a «los otros», si, sufrí el acoso y la maledicencia, acusaciones que ensuciaron treinta años de trabajo honrado, pero como lo adivinó……..? ¡NO HAY NADA ESCRITO!
9 abril 2009