Te sueño.
Te presiento.
Tú río de sangre se agitará en mi seno.
Tú pequeña forma humana,
se acurrucará en mí ser.
Tu futuro de hombre,
se gestará en mis entrañas.
Tu mundo, nacerá de mi mundo.
Mis manos acariciarán tus noches de fiebre.
Mi sueño velará tu sueño.
En las noches de insomnio cuidaré tu sueño angelical.
Lelia Di Nubila -libro Reconociéndonos